

La alimentación es la base de la salud de nuestro perro. Debe de ser equilibrada y adaptada a las necesidades de cada uno desde cachorros. Hay que ir variando la alimentación, cantidad y tipo de pienso, dependiendo de la edad, tamaño y actividad, si es una hembra y se encuentra en estado de gestación o lactancia.
Hasta que cumplen el medio año se les divide su ración diaria en tres comidas, siempre a las mismas horas, en el mismo comedero y en el mismo sitio. Después hasta los 12 meses se divid
La alimentación es la base de la salud de nuestro perro. Debe de ser equilibrada y adaptada a las necesidades de cada uno desde cachorros. Hay que ir variando la alimentación, cantidad y tipo de pienso, dependiendo de la edad, tamaño y actividad, si es una hembra y se encuentra en estado de gestación o lactancia.
Hasta que cumplen el medio año se les divide su ración diaria en tres comidas, siempre a las mismas horas, en el mismo comedero y en el mismo sitio. Después hasta los 12 meses se dividirán en mañana y noche. A partir de esta edad comerán una vez al día, salvo que queramos engordarle, en este caso se le dará dos veces al día, ya que las digestiones son menos pesadas y se asimilan mejor los alimentos.
Es fundamental que siempre disponga de un bebedero con agua fresca. Debemos cambiarla frecuentemente. Si queremos darles algo de comida casera, siempre deberemos dársela después de que coma su pienso, para que este lo condicione y sepa que tiene que comer. Ya que si lo hacemos al revés, los perros mal comedores dejaran el pienso mientras se comen lo otro. El perro tiene que acostumbrase a comer en un tiempo establecido, a su hora le pondremos el comedero y lo retiraremos en 10 minutos, a no ser que el perro siga comiendo. Entonces se esperara hasta que deje de comer, así evitaremos que se pase todo el día picoteando.
Cuando nos preparemos para viajar con nuestro compañero, es conveniente que se encuentre en ayunas. Le podemos dar una o dos barritas nutritivas como las existentes para personas pero para perros y gatos. Cuando lleguemos al destino, deberemos dejar pasar un rato hasta darle de comer. No obstante el perro o gato siempre ah de tener agua a su alcance o abastecerle cada poco.
Seria muy fácil que debido al cambio de lugar, clima etc. nuestro compañero no coma como siempre. En ese caso no deberemos de preocuparnos pero tampoco deberemos de cambiar nuestra forma de alimentarle (darle de la mano, dejarle la comida mas de lo normal etc.). Si este comportamiento siguiese más de dos días, sí se debería de acudir al veterinario.