

Una de las fobias más comunes que presentan nuestros perros es el miedo a quedarse solos en el hogar. Esta es una reacción de miedo intenso que se presenta al separarse de sus propietarios.Existen diversas hipótesis entre las que destacamos:Para un animal social como es el perro, la falta de contacto social con individuos de su misma especie o con el ser humano puede ser una situación estresante.La falta de habituación al aislamiento desde edades tempranas.Expe
Una de las fobias más comunes que presentan nuestros perros es el miedo a quedarse solos en el hogar. Esta es una reacción de miedo intenso que se presenta al separarse de sus propietarios.
Existen diversas hipótesis entre las que destacamos:
Para un animal social como es el perro, la falta de contacto social con individuos de su misma especie o con el ser humano puede ser una situación estresante.
- La falta de habituación al aislamiento desde edades tempranas.
- Experiencias traumáticas durante las primeras semanas de vida, como el castigo inconsciente.
- Algunos perros que muestran ansiedad por separación también muestran una tendencia a mostrar respuestas de miedos ante otros estímulos.
- El desarrollo de una dependencia o apego exagerado hacia el propietario. Esto podría estar asociado a un destete precoz, en cuyo caso el propietario ocuparía el papel de la madre, o podría estar asociado a otras circunstancias que favorecieran la necesidad de contacto permanente del perro con el propietario, como un periodo de vacaciones, una baja laboral, la enfermedad del perro, etc.
Las manifestaciones mas frecuentes son:
- Ladran, aúllan, de modo alto y prolongado.
- Comportamiento destructivo.
- Comportamiento de eliminación inadecuada: micción, defecación o ambas.
TRATAMIENTO
- El castigo retardado está contraindicado porque el perro difícilmente lo asociará con el comportamiento indeseable que realizó hace un rato y, además, porque produce un miedo condicionado a la llegada del propietario que agrava el problema.
- Terapia de modificación de conducta:
- Hacer una lista de las cosas que el dueño hace antes de salir de casa y modificar los hábitos para evitar dar al perro señales que le permitan anticipar la marcha de su propietario.
- No se prestará atención al perro cuando éste presente una conducta de ansiedad. Son críticos los momentos de salida y de llegada del propietario. Solo se prestará atención al perro cuando esté tranquilo.
- Programa de habituación progresiva. Comenzar las salidas, primero muy breves (5-10 segundos) e ir alargándolas.
- Terapia farmacológica. El uso de psicofármacos suele ser un buen complemento a la terapia de modificación de conducta (consulte a su veterinario), sobre todo en aquellos en los que la reacción de miedo es muy intensa.
- Otras posibilidades:
- Adquirir un segundo perro puede ser útil cuando el problema ha surgido a raíz de la muerte de otro perro.
- El confinamiento en un espacio restringido puede ser útil si se habitúa al perro a estar en ese lugar tranquilo como si fuera su guarida.
- El ejercicio antes de cada salida puede hacer que el perro esté más cansado durante la ausencia del propietario.
- Proporcionar juguetes que le puedan mantener ocupado.